El fichaje que levantó cejas y carcajadas …

¡Oh, las épicas historias de fichajes! Esta vez nos vamos con la novela de Luka Modric y su travesía para finalizar en el glorioso Santiago Bernabéu. El cuento tiene de todo: giros inesperados, un villano con cara de Daniel Levy, y obviamente, un héroe con abrigo largo, José Mourinho.

En «La Tribu», Antonio Sanz decidió compartir secretos tan bien guardados como el oro en el Banco de España: Modric quería irse al Chelsea, pero Levy, como buen antagonista, le cerró la puerta de Londres. «A cualquier sitio menos al Chelsea», dijo. Al parecer, ni siquiera en su casa lo dejan cambiar de canal.

Y allí, como en todo buen espectáculo, entra Mourinho. ¡Ole! Sin dos clubes británicos interesados, Modric fue directo al Real Madrid. Ahí Mourinho supo ser más rápido que un meme viral. Mientras tanto, el resto del mundo se pellizcaba para verificar si estaba soñando.

El panel seguía zanjando el tema. José Luis Sánchez insistía en que «lo del fin de semana fue una campaña contra el Real Madrid», mientras anotaba puntos para el bingo de la conspiración futbolística.

Sanz comentaba, con tono de director de orquesta: «La cabeza de Modric… ¿hasta cuándo aguantará?» A lo que nosotros decimos, «Luka, no te preocupes por la cabeza… ¡apunta aquellos pies mágicos donde quieras que te sigan!»

Ricardo Sierra cantaba las alabanzas de Modric, afirmando que con 25 o 30 partidos se haría una temporada épica. ¡Claro! Modric podría jugar tres partidos al mismo tiempo si quisiera.

Emilio Pérez de Rozas parecía tener un plan maestro: «En una plantilla de 25 jugadores, ¿cómo dejar fuera a Modric?» ¿Quizás piensa crear un equipo solo de Modrics?

Finalmente, la monógrafa de Yon Cuezva lo resumía: «El mérito es todo suyo. Modric, el eterno, el que convierte cada pase en un gol cantado y cada duda en certeza final.Es el héroe de todos los tiempos. ¡Gracias, Modric, por ser como el buen vino y mejorar con los años!»