La rodilla de Joan ya está para el Balón de Oro…

Joan Martínez, el joven central que ya es casi tan famoso como un jamón ibérico de pata negra, ha superado con éxito esa revisión médica que parecía una prueba de selectividad. Después de sufrir una rotura del cruzado que lo dejó fuera de combate en agosto, Joan acudió al quirófano con el prestigioso Manuel Leyes. Spoiler: la rodilla está mejor que nunca, lista para recibir un premio por su excepcional recuperación.

Como quien espera ver si su lotería es premiada, Joan fue a la revisión más nervioso que un gato en una fábrica de rockolas. Pero como buen guerrero, el resultado fue más que satisfactorio. ¡Estamos hablando de una rodilla que podría ser expuesta en el Museo del Prado!

Desde entonces, Joan está más contento que un niño con zapatos nuevos, y ya cuenta los días como quien aguarda el paquete más esperado de una famosa tienda online. A principios de abril, si todo sale según el plan, volverá a entrenar con sus compañeros del Juvenil A sin olvidarse de saludar al primer equipo de vez en cuando.

Junto a sus socios en el crossfit de las lesiones, César Palacios y Mesonero, Joan está protagonizando un auténtico show digno de Netflix, devorando etapas como si fueran tapas de croquetas en un bar madrileño. El entrenador Arbeloa ya prepara el camino para que Joan regrese como el hijo pródigo, sin dejar de lado algunos partidos amistosos para que todos adquieran más ritmo que un DJ en Ibiza.

Aunque los calendarios sean más apretados que los trajes de gala, Joan mira de reojo los partidos oficiales, soñando con la Copa de Campeones o incluso con un cameo en la convocatoria del Mundial de Clubes al mando de Ancelotti. Suena a sueño, pero como buen madrileño, Joan sabe que aquí los sueños son la ley.

Así que ahí lo tienen, Joan Martínez, el central que resurgió de sus cenizas más fuerte que nunca, con ganas de demostrar que lo bueno siempre está por llegar. Y todo apunta a que, con una rodilla así, el cielo es el límite. ¡A por todas, Joan!