Presidente del Rayo y sus sueños cósmicos…
¡Atención, damas y caballeros del fútbol! Martín Presa, la mente maestra del Rayo Vallecano, ha sacado la bola de cristal y ha decretado: «Si el Rayo quiere jugar con los mayores y no ser el primo pequeño en la cena de Navidad del fútbol profesional, necesitamos un estadio acorde a nuestros sueños astronómicos.» Al parecer, quiere que el estadio sea tan moderno que se pueda usar para aterrizajes de ovnis entre partidos. La mudanza de campo está sobre la mesa, cual tortilla en pelea con la paella por ser el plato nacional.
Mientras tanto, nuestro héroe en el banquillo, Íñigo Pérez, parece tener su silla más atornillada que el trono de la Reina de Inglaterra. «Íñigo tiene más posibilidades de quedarse la próxima temporada que la abuela en el sofá cuando hay fútbol», decía Presa mientras desvelaba sus planes. Y ojo, porque el Rayo sueña con Europa, como quien sueña con ganar la lotería, pero primero quieren asegurarse de no caerse por la ventana de Primera.
Y qué decir de Raúl de Tomás, el Hermione Granger de la delantera franjirroja, esperando resolver el hechizo que lo traiga de vuelta a la senda de los goles. Presa, como un entrenador Pokemón, asegura que «está en perfectas condiciones» y estamos convencidos de que su varita está lista para la acción. Señoras y señores, el culebrón del Rayo Vallecano no tiene fin, ¡y nosotros estamos más atentos que el VAR en el último minuto de la final!
