Coros de cariño confundido en LaLiga…
¡Atención, señoras y señores del balón! La última jornada de LaLiga ha sido tan musical que parecía que nos encontrábamos en un festival de rock punk con estribillos más pegajosos que un chicle en la suela del zapato. Imaginaos, un partido Alavés-Real Sociedad convertido en un karaoke desafinado, celebrando su propia edición de ‘Cánticos Nacionales’ con un vibrante “puta selección”. Ni se apagan las luces del evento, ni se apagan los ánimos del respetable.
Pero no todo quedó ahí, ¡no, señor! El estadio de Getafe se transformó en una caja de resonancia, donde las vocales volaban cual pelotas aéreas. Entre los coros estrepitosos, un magistral “Ceballos muérete” dirigido al pobre Dani, que seguro pensó que había contratado un tour a la villa del afecto. No es que estuvieran de mal humor, es que confunden el estadio con un teatro de tragedias griegas. ¡Dramón al canto!
Y para finalizar este capítulo digno de un cuento de los hermanos Grimm, en el Zaragoza-Huesca y otros lugares, los espectadores sacaron a relucir su vena lírica más negra con críticas dignas de un crítico gastronómico sobrecargado de picante. LaLiga, cual superhéroe enmascarado, junta sus fuerzas para pedir el poder del silencio y la paz. ¡Que la batalla por el respeto comience!
