Los infortunios de un héroe futbolístico…

¡Atención a todos! Si creían que las telenovelas solo se vivían en la televisión, es que no conocen la historia de Manuel Ángel, el centrocampista del Castilla. Este año su vida parece escrita por un guionista enamorado del drama. Como si el fútbol no fuera ya un deporte lleno de pasión y lágrimas, Manuel decidió añadir su cuota extra de emoción en forma de lesiones, dejando a su entrenador Raúl más preocupado que un pingüino en el desierto.

Imagina esto: a nuestro querido Manuel le faltaban solo un par de encuentros para convertirse en el Batman de las canchas, y de repente, ¡pum! Una lesión muscular dice «Hola, Manuel, ¿me recuerdas?» Este joven de 21 años ha pasado más tiempo en la enfermería que yo intentando armar un mueble de IKEA sin instrucciones, y el Castilla, que anda noveno en la tabla, tiene más dificultades para ascender que un gato en un tobogán con mantequilla.

El pobre Raúl, entrenador y casi terapeuta, dijo que Manuel es «especial, diferente y único». Incluso añadió que no hay otro como él, probablemente porque la habilidad de lesionarse también es un arte raro. Pero así, como quien no quiere la cosa, Manuel Ángel le dice adiós a esta temporada. ¡Solo esperamos que la próxima vea más balón y menos vendajes! Su historia es digna de un álbum de cromos: «Lesiones de Ayer y Hoy».