El tigre de Betanzos no tira la toalla…
¡Ojo al torbellino gallego que no para! Dani Rodríguez, futbolista de 36 años, está decidido a hacer lo que sea para meterse en Europa, incluso si necesita ponerse la capa de Superman y volar por los aires. Y claro, si el Real Madrid pone cara de pocos amigos, ¡pues que le pongan un cafelito caliente para que se despierten! Eso sí, Dani, conocido cariñosamente como el tigre de Betanzos, asegura que lo suyo es como el ajo: con la edad mejora el sabor. ¡Porque a este paso va a terminar metiéndose goles hasta en los petos de entrenamiento!
Por si fuera poco, Dani ha dado su bendición a Asencio. «Es un pepino de jugador», dice, aunque estuvo a punto de confundirlo con un gazpacho bien firme. Con la galantería de un torero saludando a la afición, deja caer que el temperamento del chico es asunto del Madrid, casi como si estuviera hablando de la receta secreta de la tortilla de patatas del club. Mientras tanto, Dani se prepara para la próxima batalla en el Bernabéu, sin olvidar la buena siesta previa, vital para un partido tan picante.
Y claro, a estas alturas el Mallorca parece un cohete rumbo a la luna. ¡Que si no los paran, en vez de en Europa van a terminar jugando en Marte! Sin embargo, dice Rodríguez que hablan las musarañas cada verano sobre si será su última temporada… ¡Menuda cantinela! Pero no hay prisa para colgar las botas, este hombre juega cada partido como si la madre Tierra dependiera de ello. Así que, Pablo Ortells, vete preparando las renovaciones, que al final ni la Torre de Hércules tiene tantos años de historia como le quedan a este Dani.