Armstrong el delantero travieso…
¡Atención, atención! Tomen asiento y prepárense para una de las historias más sorprendentes del fútbol. Nos referimos al día en que Gerry Armstrong, el delantero transformado en defensor, intentó secar a Santillana, ¡con la nariz más fina que un elefante buscando cacahuetes! Marcel Domingo, el entrenador que podría haber sido guionista de Hollywood, ideó este plan insólito como si estuviera diseñando el disfraz del Hombre Araña.
Damià Amer, que podría escribir una enciclopedia con sus hazañas del Mallorca, todavía sonríe al recordar aquel partido de 1984. Mientras Armstrong jugaba al escondite con Santillana, el talento de Martín Vázquez y Sanchís fue el que asestó los goles, como si el Bernabéu se convirtiera en un escenario de talentos precoces. Marcel, ese entrenador innovador con la capacidad de confundir nombres tan bien como un abuelo en Navidad, logró que Armstrong pudiera hacer un nudo marinero con las piernas de Santillana.
Por supuesto, no todo fue diversión. La temporada no tuvo un final de cuento de hadas, terminando con el descenso y con Marcel saliendo por la puerta trasera. Sin embargo, historias como estas son las que hacen que el fútbol sea más entretenido que un partido de curling en un martes frío. Amer aún recuerda con cariño a Marcel, ese entrenador que con su humor y táctica revolucionaria logró dejar una marca imborrable en el Mallorca… y en el rostro de incredulidad de Santillana.