Rangers busca entrenador con urgencia del S. O. S….

¡Agárrense a sus kilts, señoras y señores! La salida fulgurante de Barry Ferguson del banquillo del Rangers ha dejado un hueco más grande que el Lago Ness. Después de empatar 2-2 contra el Hibernian, Ferguson dijo adiós más rápido que un balón al fondo de la red en un penalti de Messi. Se fue como héroe, pero el club ya está preparando las lámparas para recibir a quien venga a salvar el día.

Según mi vecino, que tiene más chismes que un loro en una feria, los Rangers están considerando llamar a Davide Ancelotti desde el Real Madrid. Quizás piensen que los genes del fútbol se heredan como los del color de ojos, y con un Ancelotti al mando, los goles caerán como el buen aceite de oliva en una ensalada madrileña. Por ahora, el club anda más en busca de entrenador que un despistado de sus llaves.

Patrick Stewart, el jefe ejecutivo, está tan agradecido con Ferguson que, si pudiera, le daría un trofeo del tamaño de un castillo. Por su parte, Barry se va con el pecho más hinchado que un balón de campeonato, diciendo que ser entrenador del Rangers fue su «sueño». Y bueno, esperemos que el próximo en la lista venga con un par de goles bajo la manga, porque por allí sigue la aventura de los rangeros de Glasgow.