El enigma del nuevo escapista del balón…

¡Paren las rotativas! Luka Modric, el Houdini de los mediocentros, ha decidido que su espectáculo en el Santiago Bernabéu llega a su fin tras una docena de temporadas legendarias y más trofeos que calcetines perdidos en la lavadora. Según Pedja Mijatovic, conocido por su talento para leer la mente de los futbolistas, Modric habría querido un año más de magia blanca para preparar su salto a los 40 con la misma energía que un adolescente en un parque de aventuras.

Nuestro querido Pedja, quien habla como si tuviera línea directa con el oráculo de Delfos, se pregunta quién podrá asumir el pesado manto del número 10, una camiseta tan mítica que debería estar custodiada por Indiana Jones. ¡Y qué decir del propio Modric! Al parecer, el croata está descartando exóticos destinos como quien espanta moscas en verano. Prefiere batallar en las grandes ligas europeas, donde los balones ruedan más rápido que un carrito de supermercado descontrolado.

Y ahora, la gran pregunta: ¿Dónde irá Modric? No será en España, donde ya se ha comido todos los churros posibles. Inglaterra, Italia o Alemania lo esperan con los brazos abiertos y ahí, según Mijatovic, seguirá haciendo malabares con el balón, aunque sin preocuparse por el temido día de descanso. Hay quien piensa que hasta Saturno estaría dispuesto a ficharlo si permite jugar con su anillo… el celeste, claro está.