Socios longevos como tortugas ninja…
Florentino Pérez, más emocionado que un niño perdido en un parque de diversiones al ser encontrado por sus padres, presidió un acto que podría rivalizar en emoción con una final de Champions League. Con un brillo en los ojos que ni la lámpara de Aladino, el presidente del Real Madrid entregó insignias a socios que más que socios, parece que hayan firmado un pacto con el tiempo. Ni Gandalf hubiera estado tanto tiempo con un club.
«Sois el secreto de la eterna juventud del Real Madrid», dijo Florentino, sabiendo que muchos de estos socios podrían ser los verdaderos creadores del club y no lo habríamos sabido. Con más de 630 millones de seguidores, el Madrid es como el flautista de Hamelín, pero en lugar de ratas, atrae corazones futboleros de todo el mundo. Si ser del Real Madrid no te vuelve inmortal, al menos te deja como mínimo con las piernas de CR7.
Por si fuera poco, Florentino dejó caer que el Mundial de Clubes está a la vista, como quien dice que va a por el pan. ¡Ilusión! Como cuando ves esa oferta irresistible en la tienda de chuches. Con títulos al por mayor, Ancelotti y Modric a la cabeza, el Real Madrid es básicamente el buffet libre del fútbol, siempre con espacio para un trofeo más. ¡Que tiemblen los rivales, llega el Madrid con hambre de oro!