Un Madrid con estilo cósmico…

A la tercera va la vencida, o eso dicen los que tienen paciencia infinita como los tíos que repiten el mismo chiste hasta que te ríes. Al parecer, Xabi Alonso ha sacado su varita mágica, y en su tercer partido al mando, ha convertido al Real Madrid en algo tan diferente al de Ancelotti, que podría haber sido confundido con un equipo de quidditch volador. Ahora, las pompas de jabón aparecen en el campo cada vez que hacen un pase perfecto.

¿Es mejor que el circo de Ancelotti? Pues eso lo dirá el tiempo o algún oráculo con bolas de cristal, porque en el fútbol, queridos amigos, esto no es solo cuestión de bonitos pases y elegantes filigranas. Aquí lo que cuenta es meter el balón en la portería rival, sin dejarse buscar low-cost por alguna nube descarriada. Y sí, por ahora el Madrid de Alonso ha encandilado como un desfile de modas de pipas, pero no olvidemos que Ancelotti dejó el listón tan alto, que los pájaros se lo usan de gimnasio.

¡Así que atentos! Los madridistas pueden finalmente colgar sus bufandas de los balcones con orgullo, como si fueran banderas piratas en un barco imaginario. Pero cuidado, que el camino es largo y quizás al Madrid de Alonso le toque pelear contra molinos de viento y no precisamente como un caballero manchego. ¿Qué sigue, montar un dragón en el Bernabéu? ¡Nada es imposible en el universo de Xabi!