Del Benfica al Madrid como si fuera un Jedi…
En la sala de prensa de Valdebebas, la atmósfera era digna de película de Star Wars. Las puertas se abrieron con efectos especiales para presentar a Álvaro Carreras, convertido en el nuevo caballero Jedi del Madrid. Sí, señores, tras una negociación digna de una telenovela, el Benfica finalmente cedió, y 50 millones de euros volaron hacia Lisboa como si fueran golondrinas en verano. Y todo para traer de regreso al hijo pródigo. ¡Qué emotivo fue oírle repetir que este es «el mejor día de su vida»! Como si hubiera encontrado el último trozo de pizza en la nevera.
El nuevo dorsal 18 del Real Madrid dice que no es supersticioso, que da igual el número que le pongan. Está dispuesto a usar incluso el número 0 si eso le permite deslizarse por la banda como si estuviera en una pista de patinaje sobre hielo. Mientras tanto, Florentino Pérez, con lágrimas de felicidad, decía que el Madrid es un sentimiento tan universal que hasta los alienígenas lo sintonizan desde Marte. Carreras ha firmado un contrato de seis años pensando que todo el tiempo pasará a la velocidad del rayo.
Carreras, quien ha sido jugador estrella tanto en el Manchester United como en el Benfica, está listo para jugarse el puesto por España. Pero en una batalla tan épica como la de los Vengadores, deberá enfrentarse a los titanes Cucurella, Grimaldo y Balde. España tiene tantos laterales zurdos como memes de futbolistas haciendo cosas raras. Sin embargo, Carreras está decidido a brillar con luz propia. «Voy a conquistar la banda izquierda, y no pienso dejar títere con cabeza», ha asegurado, pensando ya en romper récords y corazones por igual.