El nuevo estilo del equipo alivia el estrés al belga…
El cambio táctico del Real Madrid ha transformado a su equipo en una playa de relajación para Courtois. De ser una muralla sobrecargada, ha pasado a disfrutar de lo lindo en los tres partidos de Liga hasta ahora. Con apenas cinco paradas, es como si estuviera en una clase de yoga mientras Oblak sufre más ataques que un pastel en una fiesta de cumpleaños. El portero belga sólo ha encajado un gol, igualando a Luis Júnior del Villarreal en defensas de acero.
El anterior Courtois parecía un pulpo en un buffet, parando tiros de todo tipo. En la temporada 21-22, fue como si hubiera estado en las Olimpíadas de paradas. Pero ahora, tiene que concentrarse en no adormecerse, ya que el nuevo esquema del entrenador lo hace sentirse como un delantero falso, casi jugando de mediocampista. Durante el partido contra el Oviedo, ‘Tibu’ aseguraba: «Corro tanto que me siento como si estuviera preparando una maratón de alta sociedad», tras ayudar a sellar otra portería a cero.
