Valoración del Madrid: Cambios, estrategia y humor

Cuando Ancelotti llegó al estadio, se escucharon susurros de que había hecho magia de nuevo. Tres cambios para sorprender al Osasuna, equipo conocido por guardar celosamente su territorio. Con Fran García, Modric y Brahim en el campo, el mister italiano parecía más un chef preparando un suculento guiso que un entrenador de fútbol.

Con 18 victorias, 5 empates y una sola derrota en este campo, uno podría pensar que el Madrid ya conoce este césped como el salón de su casa. Sin embargo, los blancos decidieron echarle un poco de picante al asunto. No olvidemos que lo importante es la Champions, y en la ida frente al Manchester City, ya pusieron la paella a punto con un 2-3.

Y ahí estaban ellos: Courtois, que paró balones como si fueran mosquitos en agosto; Valverde, que corrió más que un niño al oír la campana del recreo; y Tchouaméni, poniendo más barro que el mismísimo Chapulín Colorado. Modric, casi poético, y Brahim, haciendo un papel estelar.

Por supuesto, no podía faltar Vinicius, nuestro bailarín favorito, ni Mbappé, que todavía es un sueño madridista, pero le jugamos como si ya estuviese con nosotros. ¡Vamos, Ancelotti, no te diremos cómo hacerlo, pero sigue así y te invitamos a tapas!