¡Ancelotti cambia las copas por caipirinhas!…

¡Alerta, pinta de luto galáctico en el Bernabéu! Carlo Ancelotti, conocido también como el arquitecto del trebolinho de Champions, ha anunciado que va a cambiar los banquillos madrileños por las playas cariocas. Es decir, va de ponerse gafas de Sol en la Castellana a broncearse en Ipanema. Sí gente, Carletto va a llevar su orquesta táctica a la samba brasileña, donde intentará convertir las caipirinhas en Copas del Mundo. ¡Imagínatelo organizando a la Canarinha como el capitán de un crucero de vacaciones! Sombrerito incluido.

El querido Carletto se irá con un homenaje marca de la casa de 120 decibelios y un ovillo de kleenex que no lo supera ni un drama de telenovela. Después de 353 partidos en el trono blanco y una colección de títulos que haría palidecer al mismo Rey Midas del fútbol, Carletto se despide para conquistar el sexto Mundial de Brasil, mientras deja a Xabi Alonso con la misión imposible de cambiar tristeza por torrentes de alegría en Chamartín. Vamos, que es como dejar el trono de un rey al aprendiz de brujo en plena piscina de tiburones.

Florentino Pérez seguramente ya esté preparando una estatua en la galería de las leyendas blancas y no será pequeña, porque las 15 copas de Carletto ocupan más espacio que la colección de trofeos de un coleccionista obsesivo. El Real Madrid, que ha visto a los dioses del balón volar y aterrizar, despide al italiano con más honores que la Reina de Inglaterra. ¡Quién habría dicho que un día de despedida podría ser más emotivo que un reencuentro de Friends!