Un rompecabezas más difícil que un cubo Rubik para Carlo…
¡Atención, aficionados del balón! El Real Madrid está tan falto de defensas que hasta las cortinas del Bernabéu han tenido que rechazar la oferta de jugar el próximo partido. Carlo Ancelotti mira hacia la cantera con la misma esperanza que un náufrago ve una balsa. Después de un violento ataque de lesiones que arrasó su zaga, parece que el entrenador italiano tiene más problemas que un árbitro en El Clásico. Con Rüdiger, Alaba y Mendy de vacaciones en la enfermería, la situación defensiva está más débil que una tarjeta amarilla intentando evitar una roja.
Mientras tanto, Raúl Asencio se ha convertido en el superhéroe inesperado que intenta tapar los agujeros de la defensa blanca, pero sin capa porque aquí el frío y la moda son lo de menos. El joven central ha sido convocado a bailar en el eje de la defensa, pero necesita pareja urgentemente. No hablamos de una discoteca cualquiera: hablamos de enfrentarse a los pesados del Celta. Aunque al pobre Tchouaméni le han pasado el papel de hacer de defensa improvisado. Porque, vamos, ¿qué es un clásicoerf sin un poco de locura estratégica?
Aquí es donde los jóvenes Yusi y Jacobo Ramón entran en escena, con la seguridad de un debutante con botas lustrosas y una sonrisa que afirma: ‘¿Balón?’ Pues nunca lo han practicado mejor. Se dice que Yusi intenta llenar el hueco de Mendy paseando por el césped como un joven gazapo mientras que Jacobo Ramón ya tuvo su momento ‘taquicárdico’ con el Madrid frente al Leganés. Parece que la cantera madrileña está a punto de ser jurado del el último concurso reality, donde la defensa será juzgada, premiada y, con suerte, no descalificada. ¡Venga, chicos, que la esperanza es lo último que se defiende!