El desfile futbolístico-marbellí…
Cual si fuera director de orquesta, Arbeloa dirige el férreo desfile de jugadores del Castilla desde su trono técnico, que más bien parece un tiovivo de caras nuevas, en el primer amistoso contra los caballeros del Marbella. En un alarde de modernidad que ni Da Vinci imaginó, el Castilla se ha retocado más que una estrella de rock de gira. Con solo siete valientes retornando de la temporada pasada, estos guerreros se complementan ahora con refuerzos del Juvenil A, el Madrid C, ¡y hasta un delantero misterioso llamado Rachad Fettal que promete hacer más goles que Gandalf al frente de las Puertas de Moria!
La preparación es tan intensa que, según Arbeloa, van a autografiar el piso de Marbella con sus huellas. «Cada jugador tiene que saber que formarse en el Real Madrid te vuelve más fuerte que Hulk comiendo espinacas», comentaba Arbeloa mientras ajustaba sus gafas de entrenador. Quieren que el equipo no solo corra, sino que vuele, como un escuadrón de Supermanes en botas de fútbol, llevando la iniciativa y presionando más alto que el Everest.
¿Y el resto de jugadores? Más repartidos que cartas en noche de póker: 24 seleccionados incluían defensas, medios y delanteros que prometen ser más salvajes que una jungla brasileña. Aunque algunos ausentes por lesión o magia negra, los que quedan parecen más listos que un fajo de billetes para enfrentarse al Racing de Ferrol el 2 de agosto. «El éxito está en el ADN del Castilla», concluía Arbeloa mientras pensaba si la camiseta le quedaba mejor con o sin capa de superhéroe.