De ganar cacahuetes a robar el protagonismo a los galácticos…
Asencio desembarcó en el primer equipo del Real Madrid casi como quien aterriza de emergencia en una isla desierta. En un suspiro pasó de jugar para el Castilla a codearse con superestrellas del calibre de Mbappé o Vinicius, todo mientras su cuenta bancaria apenas notaba la diferencia. Con un humilde salario de menos de 200.000 euros, Asencio jugaba como titular, mientras a su alrededor solo se escuchaban las risas de los contratos millonarios de sus compañeros. En términos salariales, era casi como el hermano pobre perdido en una reunión familiar de jeques.
Durante meses, el Real Madrid disfrutó viendo brillar a su joven estrella con un contrato que podría haber sido una broma de mal gusto en el vestuario del equipo. La cosa es que, a la vista estaba, ese collarín salarial no podía durar eternamente. Tras un desfile de actuaciones memorables y una llamada muy esperada de la Selección, el club entendió que había que aflojar el monedero. La renovación ya es un hecho, y Asencio pasa del club del low-cost al del lujo, con un nuevo contrato que le hará millonario antes de que termine de deshacer las maletas.
Además, no es solo el Madrid quien cree en su magia: Asencio también se ha calzado los Skechers para transformar su impacto en las redes a nivel global. ¿El resultado? Un contrato hasta 2027 que lo empareja en anuncios con el mismísimo Harry Kane. Desde luego, si de pasos se trata, Asencio definitivamente sabe cómo darlos, y con estilo, mientras el mundo lo sigue con admiración y una pizca de envidia. ¡Dale, Asencio!