Cuando una amarilla casi lleva a Bellingham al banquillo…
En una noche que prometía ser memorable en Wembley, Inglaterra y Letonia se dieron cita para un duelo que resultó ser más espectáculo que fútbol. Mientras los ingleses se llevaban un aburrido 3-0, el partido se encendió gracias al jugador del Real Madrid, Jude Bellingham, conocido ahora como el «Espartano del Balón Amarillo».
Nuestro querido Jude decidió añadir un poco de drama al asunto con una entrada digna de cualquier película de acción. Todo comenzó cuando recibió una amarilla justo al borde del descanso. Siguiendo con su imparable espíritu guerrero, Bellingham protagonizó una entrada que hizo que más de un aficionado inglés sudase más que en una sauna finlandesa.
Viéndose obligado a canalizar a un estratega del ajedrez, el entrenador Tuchel tomó una decisión digna de película de espías: sacar a Bellingham del juego antes de que su guerrero balón amarillo se convirtiera en un hincha más, viendo el partido desde el banquillo.
La prensa, con «The Sun» y «Daily Mail» a la cabeza, no tardó en señalar al joven como el nuevo gladiador del campo, recordándole que los partidos se ganan con goles, no con movimientos de karate. Definitivamente, una noche épica para el álbum de fotos de Bellingham.