Humor blanco en una noche memorable…
La magia blanca se desató en el Santiago Bernabéu y no solo por el brillante fútbol desplegado. En un partido de infarto, con Ancelotti y Mbappé de coprotagonistas, el Real Madrid dejó en pañales al Manchester City con un 6-2 global que despertó los fantasmas de aquel mítico 2-6. Pero la verdadera estrella de la noche fue el humor del aficionado madridista.
Todo comenzó con el primer gol del francés, cuando la grada decidió estrenarse con un curioso “Guardiola, quédate”, dejando a más de uno rascándose la cabeza. No contentos con eso, siguieron con el baile al ritmo de Guardiola y sus recuerdos en el banquillo azulgrana.
Cuando el Madrid marcó el tercero, las carcajadas se intensificaron y la afición se entregó al tiki-taka irónico. Tanto así, que el técnico del City salió del Bernabéu con un aplomo digno de elogio, abrazando a Ancelotti en un gesto que casi hizo llorar a los románticos del fútbol.
Y es que al finalizar, Pep fue todo un caballero: saludó a los árbitros, felicitó a los jugadores blancos y hasta saludó a los valientes 2.000 aficionados del City presentes. Así, la noche en el Bernabéu será recordada no solo por el hat-trick de Mbappé, sino por las risas y el buen humor de una afición que sabe disfrutar, incluso en las grandes citas.