La Cartuja se llenó de goles y billetes…

¡Vaya golazo económico! Resulta que la final de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Real Madrid no solo fue un festival de emociones en el estadio La Cartuja, sino también una lluvia de billetes que superó los 75 millones de euros. Sí, como lo oye, querido lector: más que una hucha, esto fue una caja registradora saltarina. La Junta de Andalucía está tan encantada que están buscando si en algún rincón del Estadio se escondió el mapa de un tesoro pirata del siglo XVIII.

La consejera Patricia del Pozo, convertida en una suerte de maga Merlín, insinuó que este impacto podría llegar a los 90 millones, lo que comparado con los 25 millones adicionales previstos por los hispalenses, hace que Sevilla quede más llena de sorpresas que un tupper olvidado en el frigorífico. Además, nada menos que 300 periodistas de todo el planeta vinieron a cubrir el evento; ¡más que un concierto de los Beatles en su apogeo!

Que no cunda el pánico, porque la próxima vez La Cartuja seguirá pulverizando marcas, transformada de cero a héroe, cual ‘Cenicienta’ de los estadios. Con 70.000 localidades y ambiciones de anfitriona para el Mundial 2030, parece que este recinto sevillano ha pasado de casi ruinoso a estrella de la liga global. Alguien que le ponga una capa de superhéroe, por favor.