El Real Madrid, el pescador de talentos libres…
¡Atención, señoras y señores, porque el Real Madrid se ha puesto el traje de cazador de estrellas como si fuera Indiana Jones buscando el Santo Grial, con la diferencia de que aquí el premio es un futbolista sin contrato! Los de blanco llevan más de 15 meses de suspense, que es casi una serie de Netflix, persiguiendo a Trent Alexander Arnold por la selva futbolística. Parece que al joven inglés le han hecho un tour por Cibeles que ni el mismísimo Cristiano Ronaldo. ¡Y ahora dicen que le han echado el lazo!
Recordemos, amigos de lo merengue, que jugadores como Alaba y Rüdiger ya se colaron en el Santiago Bernabéu más baratos que una entrada de cine los miércoles. Su hazaña consistió en resistir en sus equipos más tiempo que una siesta española para poder lucir el blanco Madridista. ¡Ni Houdini en sus mejores espectáculos logró tal escapismo contractual como ellos sorprendiendo a la prensa y rivalizando con los pingüinos por su amor por el blanco!
¿Y qué pasa con Konaté, ese central del Liverpool que ya suena como saxofón en partido de jazz? Su contrato a punto de expirar es el nuevo cebo en el río, y los fans ya se agarran a sus asientos sospechando la jugada maestra de Juni Calafat. Mientras tanto, en el paisaje futbolístico, se debate si los contratos de jóvenes talentos como Huijsen y Mastantuono son más jugosos que el zumo de naranja por las mañanas. Hay rumores que hasta el Valencia y el Arsenal sienten cosquillas con tanta especulación. ¡El Real Madrid transforma todo en rumores galácticos desde Valdebebas!
