El árbitro con pedigrí futbolero…

¡Redoble de trompetas, señoras y señores! Ricardo de Burgos Bengoetxea ha sido coronado como guardián del silbato para la final de la Copa del Rey entre los históricos Barcelona y Real Madrid. Este mago del arbitraje vasco, confiado por el Comité Técnico de Árbitros como el cartero de su vecindario en Navidad, dirigirá el duelo más candente del año en La Cartuja. ¡Este partido promete más emoción que una telenovela mexicana!

Nuestro héroe con silbato de oro proviene de una familia de árbitros (sí, es como la realeza del pito). Con diez años en Primera y siete haciendo pitos internacionales, su currículum podría asustar hasta al árbitro de la Champions. Ya desde joven, Bengoetxea pitaba derbis madrileños y en 2017 impartió justicia en un Clásico donde Cristiano Ronaldo fue despedido al estilo «Gran Hermano» con tarjeta roja y todo.

De Burgos es un árbitro tan ecuánime que podría ser árbitro de la ONU. Ha estado al mando en 31 partidos del Barça, como quien dice: «Dos cucharadas para ti, Real Madrid», que ha visto el pito solo 25 veces. Nuestra estrella es famosa por explicar sus decisiones como un maestro en clase de matemáticas, a diferencia de otros árbitros que lanzan tarjetas como si fueran confeti en una fiesta. Inicialmente, se rumoreó que César Soto Grado recibiría el honor, pero parece que De Burgos ha ganado la final antes de que empiece el partido.