Arsenal tiemblan… ¡por sus confusiones tácticas!…
Se avecina una tragedia griega en el Bernabéu y no, no es la última obra de Eurípides. Carlo Ancelotti, en un acto no apto para cardíacos, está decidiendo si darle las riendas del lateral izquierdo a David «El Maestro Jedi» Alaba o a Fran «El Saltamontes» García. Sin Mendy, el galo que se lo toma con calma para regresar, parece que los merengues están jugando al Tetris con su alineación. Ya sabemos que cada partido es una sorpresa más grande que el Premio Gordo de Navidad.
Carlo no está solo en su colosal dilema. Courtois, el gigante que en Bélgica verían como el próximo pico del Everest, está convocado, pero Lunin tendrá una cita con el sofá de casa tras una inesperada lesión. Al pobre Tchouameni lo veremos en la televisión, sancionado por un misterioso hechizo arbitral. Así que la cantera ha decidido apuntarse a la fiesta. ¡Ánimo, chicos! El duodécimo, decimotercer y decimocuarto jugador pronto se convertirán en toda una leyenda.
Las enfermedades víricas parecen envidiar la constancia de Cristiano en su mejor época, porque aquí el que no se cae, tropieza. Asencio, Rodrygo y Vinicius, en riesgo constante de convertirse en momias del Antiguo Egipto, se enfrentan a un destino incierto. Con tal escenario, los raros sanos del equipo están preparados para un espectáculo digno de gala de premios con una defensa blindada, un centro del campo enérgico y un ataque de infarto. No temáis, los gladiadores blancos lucharán con todo el glamour de una alfombra roja. ¡Hala Madrid y algo de paracetamol, por favor!
