Al Khelaifi y su caza de talentos merengues…
En París, donde el caviar parece servirse frío, la digestión del «menú Mbappé» sigue siendo pesada. Después de ver al delantero francés tomar el tren AVE hacia Madrid sin dejar un céntimo en la oficina de Al Khelaifi, ahora el PSG decide merodear por La Fábrica del Real Madrid en busca de su propia joya. Tal vez esperan encontrar un «Mbappito» en un envoltorio blanco.
Mientras que los equipos podrían enfrentarse en una futura final europea, los parisinos no pierden el tiempo y han sido vistos en los bares de tapas alrededor de Valdebebas. Se rumorea que un misterioso grupo de ojeadores del PSG merodea como gatos alrededor de un plato de sardinas, esperando echarle el ojo a las jóvenes promesas del Madrid. Ancelotti, con esperpento italiano, observa cómo sus chicos podrían ser seducidos por las luces de la Torre Eiffel.
En un reciente torneo en Doha, el equipo cadete del Real Madrid brilló más que un balón de oro. Bryan Bugarín, joven estrella y nuevo fichaje profesional del club, deslumbró como si llevara zapatos de nieve en el desierto. Tras la victoria inesperada del Madrid sobre el PSG en el torneo, Al Khelaifi apareció en los vestuarios, tal vez buscando autógrafos o, quién sabe, nuevas estrellas para su constelación en París.
