Una Carrera de obstáculos al Bernabéu…
Florentino Pérez ha dado un salto de alegría al estilo de un pingüino en un trampolín durante el regreso de Álvaro Carreras. El jugador ha vuelto al Real Madrid como quien vuelve de las vacaciones con kilos de más y con anécdotas que contar. Florentino parecía una abuela en la boda de su nieto cuando dijo que los millones de madridistas estaban más contentos que un perro con dos colas. ¡Ni el Amazon Prime entrega tanto en un día! Álvaro decidió salir del nido allá en 2020 para crecer, como esos guisantes que se plantan en un frasco de vidrio para sorpresa de todos cuando florecen.
«Regresas al Real Madrid con más determinación que un gato persiguiendo un punto láser», dijo Florentino, aplicando las habilidades de relaciones públicas que tantos contratos han firmado. Ésta es una travesía que incluso Cristóbal Colón envidiaría: del Madrid al Benfica y vuelta, como quien sale por leche y vuelve cargado de bolsas del supermercado. ¡Que quede claro, el Bernabéu se presenta como el Everest de tus desafíos, querido Carreras!
El club merengue ha sacado los billetitos y ha pagado 50 millones por esta nueva esperanza blanca. Carreras llega listo para pisar la Pista de los Sueños y repentinamente se encuentra en una mezcla de «Los Vengadores» del césped. Con fichajes como Xabi Alonso, Trent, Huijsen y Mastantuono, han puesto la guinda en un pastel que a Willy Wonka le encantaría hornear. Florentino aseguró que estamos en pleno ciclo del «chocolate con churros» de los clubes, ¡ni Da Vinci podría haber pintado una mejor dinastía con estos ingredientes ganadores!