La misión intergaláctica del Celta en el Bernabéu…

Con la misma actitud que un niño en una tienda de chuches, Giráldez ha aparecido en la rueda de prensa listo para enfrentar al Real Madrid. Como un moderno Don Quijote enfrentando molinos, el entrenador del Celta está convencido de que su equipo puede dar una función digna de escenario interplanetario en el Santiago Bernabéu. Su plan es tan ambicioso como intentar bailar flamenco sobre hielo. Quiere ganar los cinco partidos que quedan, y si no lo logra, por lo menos disfrutarán como si fuera una fiesta de cumpleaños sorpresa.

Imitando a un niño que se escapa abrazado a su pelota después de perder una maratón infantil, Giráldez parece no temer al gigante blanco. Aunque el Real Madrid haya perdido la Copa, está seguro de que su rival vendrá más motivado que un cohete de la NASA con destino a Marte. Y, a pesar de las bajas madrileñas en la defensa, Giráldez está preparado como si enfrentara al ejército de Napoleón en chándal.

Arropado por su encantadora fe, Giráldez afirma querer ganar esos cinco partidos y llegar a Europa, cual astronauta que sueña dar un paseíto por la Luna. Confiado en que el árbitro será imparcial, apuesta por resultados más épicos que una novela de Julio Verne. Y no es para menos; ganar o perder, con o sin VAR, lo importante es que sueñan libremente, ¡y de eso se trata el fútbol!