Cuando el Clarín es Rojiblanco y no Blanco…
Parece que el Cholo Simeone, como un moderno Don Quijote, ha estado combatiendo los molinos blancos del Real Madrid con resultados mixtos. Aunque él aún está ajustando sus armas tácticas con 12 triunfos, 18 tropezones y 15 empates, sus caballeros Griezmann, Giménez y Lino están ganando la guerra de la capital, al menos en sus propias crónicas.
Antoine Griezmann, conocido por su amor incondicional a las diademas y las celebraciones de Fortnite, ha logrado convertir su historia de terror en sueños de gloria rojiblancos. Después de algunos desastres horrorosos con la Real Sociedad y una aventura conflictiva con el Barça, el ‘Principito’ ha alcanzado la doble cifra de victorias cuando se viste de colchonero.
Por su parte, Giménez, que hace llorar a los delanteros rivales más que una cebolla fresca, presume de ganar una de cada dos batallas contra los galácticos. Incluso ha clavado su bandera charrúa dos veces en el marcador, demostrando que la zurda también puede ser afilada.
Lino, por último, parece ser el futbolista camaleón del Atleti, igual de cómodo en la alfombra roja o en las trincheras del derbi. Con sus números, incluso las estatuas de oso y madroño parecen sacudir sus ramas en homenaje al colorido espectro que ahora domina la ciudad.
