El fenómeno de Valdebebas…
Dean Huijsen, el joven defensa que parece haber bajado de una nave espacial en Valdebebas, ha causado un terremoto más fuerte que un taconazo de Zidane en la sala de prensa. Su entrada triunfal al Real Madrid recarga de energía galáctica al equipo. Con la rapidez de un penalti bien lanzado, dejó claro que no ha llegado para hablar, porque para eso están los telediarios. Llegó para darle al esférico hasta que Pérez le haga una estatua de oro en el Bernabéu, o al menos de bronce reluciente.
Con la emoción de un niño en una tienda de caramelos, Huijsen ha mencionado que el 24 no es un simple número, ¡es el número de la suerte del universo! Y sobre Xabi Alonso dice que hablaron, y claro, uno no habla con Xabi cada día, a menos que tengas un póster suyo en la habitación y le hables antes de dormir, que todo podría ser. Encaja en el Madrid como Cristiano en un spot de champú, lo que augura años de fútbol tan dorados como la paella de tu abuela en verano.
Este chaval no se achanta, y ser el defensa más caro del Madrid le importa tanto como una nube en el cielo. Ah, y por ahí dijo que Ramos, el titán de los defensas, le envió un mensaje para marcar un gol en su debut. Entre llamadas de Mourinho cual explosión navideña y sueños de ganar más trofeos que espacio físico en el museo del Madrid, nuestro amiguito Huijsen ha llegado para llevar al Madrid ¡más allá de las estrellas!