¡El árbitro en plan villano!…

En la noche del fútbol sin pelos en la lengua, el gran escenario del debate deportivo se convierte en un circo de opiniones. Irati Vidal, con la sinceridad de un poeta en un concurso de talentos, sentencia: “¡Con este arbitraje, el Barça debe jugar mejor que Messi en modo ninja para ganar LaLiga!” Parece que el arbitraje del Bernabéu ha sido como ver un partido con gafas 3D al revés.

Mientras tanto, Látigo Serrano, con el fanatismo de un niño en una tienda de chuches, insiste en que el Barça se alzará con LaLiga en la jornada 35, dejando al Real Madrid rezagado como un tranvía en día de atasco. El Barça de Flick sigue en plan cohete espacial y más vale que no se le acaben los carburantes de la victoria.

Pablo López, cual Nostradamus del fútbol moderno, profetiza un futuro sombrío para el Atlético, como un chiste sin final feliz. Y Méndez, por su parte, nos ofrece una de estas estadísticas al estilo película de acción, argumentando que el Barça tiene un 55% de ganar LaLiga, mientras el Real intenta remontar con un 45%. ¡La tensión se puede cortar con cuchillo de plástico!