La mamá de Mbappé y el drama del Caen FC…
Kylian Mbappé, que no sólo sabe driblar defensores, sino también decisiones empresariales, se ha visto enredado en un culebrón propio de sobremesa con su querido Caen. El club francés, bajo su mando, ha descendido a la National 1, o como dirían en el barrio, «la liga de los que juegan con dos delanteros y tres sandwiches en la mochila». Frente a la furia de los fans que tachan a Kylian y su familia de ser el meme del año, su madre, más aguerrida que Aragorn al frente de sus tropas, ha salido con espadas y pancartas al rescate de su cachorro mediático.
En un despliegue digno de los mejores discursos motivacionales del siglo XXI, Fayza Lamari ha dejado claro que Mbappé ha puesto más billetes sobre la mesa que el Monopolio en una tarde de tías. Respondiendo como sólo una mamá leona haría, y con el brillo del torneo en la mirada, ha decidido que abandonar el barco del Caen sería más deshonesto que un gol con la mano. ¡Palabras de escudo y esperanza!
Porque al final, dejar el barquito a la deriva no es estilo Mbappé. Con el mismo increíble poder de convicción que le permite evitar tarjetas al final del partido, Kylian persuadió a mamá de que el descenso es solo un obstáculo para una historia épica. ¡Y qué historia más heroica si terminan en la Ligue 2 otra vez! Mientras tanto, Fayza sueña con un proyecto social más grande que los headlines de la prensa: interés por los chavales jóvenes. ¡Goles, proyectos y sueños a la par! ¡Vamos, Caen, que el balón sigue rodando y la vida sigue girando!
