El adiós emotivo de Ancelotti en Valdebebas…
¡Ah, amigos del balón y del estadio! Las despedidas en el fútbol son como los espaguetis sin salsa, siempre dejan sabor agridulce. Esta vez, el legendario Carlo Ancelotti se despidió del Bernabéu entre tanto llanto que peligra que el Manzanares aumente su caudal. Ancelotti, ese caballero del fútbol que casi puede usar su sonrisa para encender las luces del Santiago Bernabéu, sintió el adiós como un delantero siente la presión de un penalti en el minuto 90.
Con un Modric más nostálgico que un abuelo contando aventuras de la mili, y un Lucas Vázquez que sigue entrenando como si las vacaciones no existieran, la ciudad deportiva Valdebebas se convirtió en un festival de kleenex y abrazos. Ancelotti, quien lleva en su corazón un GPS siempre sintonizado a Radio MARCA, paseó por todo Valdebebas repartiendo cariño desde la entrada hasta el comedor, como si fuera Papá Noel en pleno agosto.
En su última rueda de prensa, la ovación fue tan estruendosa que las palmas se escucharon hasta el Wanda Metropolitano. El Madrid, honrando su toque de melodrama, lanzó un video de despedida tan emotivo que ni la escena de la Titanic podría superarlo. Con la promesa de futuros reencuentros, Carlo se aleja, dejando una venta de pañuelos récord y un Bernabéu listo para más anécdotas. ¡Hasta pronto, mago Ancelotti, volarás alto y regresarás! ¡Hala Madrid!
