Cuando jugar al fútbol parece un acto de magia…
El Real Madrid salió al campo contra el Betis y parecía que estaban jugando en una piscina sin salvavidas. Aunque Jovic nos dio una bocanada inicial de aire con un golito, el equipo terminó como un pez fuera del agua, sin saber dónde estaban ni cómo empatar. Ancelotti se encontraba en un laberinto sin encontrar el camino fuera, extrañando la chispa de Valverde y Bellingham.
Lo bueno es que al menos Valverde estará de vuelta para enfrentar al Atlético, pero Bellingham, nuestro mago inglés, se quedará en la grada por sanción. ¡La temporada es un maratón, no un sprint! Y Ceballos, que podría haber echado una mano, está fuera dos meses, viendo el partido desde la enfermería.
Carletto tiene que decidir si deja a Valverde en su rol de «superhéroe del lateral» o lo coloca en el medio buscando más músculo y cerebro en el campo. Sin Ceballos, Valverde recuperará el mediocampo para darle vida al equipo.
Por lo menos, Brahim está listo para el reto, e incluso puede que veamos una rotación de bailes en el medio. Camavinga y Güler, despierta, chicos, que necesitamos magia en el Bernabéu. Alaba volvió, pero parece que Asencio sigue siendo el consentido de Carletto. ¡Vamos Madrid! 🎩⚽🪄