Defensa nueva, vida nueva y millones volando…
¡Atrás las vacas flacas y adelante las fortunas blancas! El Real Madrid ha decidido que ya basta de defensas con fisuras. Y para enmendar lo que bien podría parecer una valla de jardín suburbano, ha arrojado más de 100 millones de euros, como quien lanza confeti en una fiesta galáctica, comprando defendesaurios para el Mundial de Clubes.
El primero en aterrizar ha sido Dean Huijsen, quien arribó desde el Bournemouth a un precio que haría ruborizar al mismísimo Monopoly: 58 millones de euros. Y por si un lateral izquierdo era poco, llega Álvarito Carreras desde el Benfica por el módico precio de 50 millones. ¡Pero nada está más blindado que el lateral de tu pantalla! Y para rematar, un as bajo la manga: Trent Alexander-Arnold, cono gratis al estilo heladero, pero con una propina de 10 millones de euros por ser tan majo y llegar antes del mundialito.
Con estos fichajes, Xabi Alonso podrá dejar de hacer malabares y enfocarse en otras habilidades, como decorar la sala de trofeos, porque estos defensores están listos para enfrentarse hasta a los invasores alienígenas. Mientras tanto, los fans del Madrid ya ensayan su grito de campeón y hueco en sus estanterías para otro trofeo reluciente. ¡La galaxia del fútbol tiene nuevo equipo estelar, y no necesita permiso para despegar!