El regreso más breve desde el café espresso…

Las expectativas estaban por las nubes, pero Mendy trajo las risas al césped con un espectáculo digno del circo del sol. Ocho minutos, señores y señoras, ¡OCHO! Ni un café instantáneo se hace tan rápido. Este lateral francés se fue directo a la banqueta como si fuera un maratón de sillas musicales, en la final más esperada de la temporada.

Ancelotti debió sentirse como un domador de leones en plena actuación, porque entre lesiones y desconfianzas, ya no sabía ni por dónde le venían los problemas. Camavinga ninguneado y García con cara de «yo no fui». El pobre hombre tuvo que sacar a Mendy del sombrero de copa pensando que iba a ser su conejo mágico. Spoiler: el conejo estaba de vacaciones.

Ahora, ante la cuarta desaparición en escena de Mendy, el Madrid se enfrenta a una crisis de laterales que parece salida de una serie de telenovela. Con un ‘agujero negro’ en el lateral izquierdo digno de un mapa del tesoro pirata, el club se arma de paciencia, curitas y algún que otro amuleto, ¿dónde quedará el glamour del fútbol cuando hasta el masajista se resienta del estrés?