El Madrid cojea y el Lega reza por un disfraz…

El Real Madrid se prepara para la batalla en el Bernabéu, con más bajas que un estudiante en época de exámenes. Ancelotti ha tenido que armar una alineación cual Tetris de lesionados, con Courtois liderando la lista de las ausencias. Vallejo regresa casi con la emoción de quien encuentra un billete en un viejo abrigo. Mientras tanto, el Leganés afila sus uñas soñando con un milagro más grande que encontrar un unicornio en la Gran Vía.

Los blancos vuelven a casa después de 20 días vagando por el mundo futbolístico y traen en sus maletas la presión de sumar cada punto en su fortaleza donde jugarán seis de los 10 partidos restantes. Con el Bernabéu convertido en una especie de spa emocional, el Madrid quiere evitar resbalones en el clásico pastel de plátano que puede ofrecer el Leganés.

Los pepineros, por su parte, llegan con la esperanza de que sus mediocentros paren de toser en el Bernabéu. Con dudas en el medio campo tan serias como un examen sorpresa, Borja Jiménez espera que el resto de su alineación compense las ausencias. Con la moral más alta que un faro, intentarán lograr la primera victoria de su historia en el santuario madridista. Se viene un partido digno de palomitas y muchas uñas mordidas.