El brasileño relata el show del banquillo madridista…
Rodrygo Goes llega al Metropolitano y descubre que los balones tienen vida propia. En el primer partido en el Bernabéu, fue la pesadilla de Simeone, quien incluso cambió su estrategia para el partido de vuelta. Pero esta vez el brasileño observó desde el banco una película digna de ciencia ficción: el disparo de Julián Álvarez con vida propia.
El espectáculo comenzó cuando Julián Álvarez realizó su lanzamiento y el balón decidió hacer un paso de baile. Rodrygo y sus compañeros en el banquillo del Madrid se rascaron la cabeza. «¡Eso tuvo dos toques!», comenzaron a gritar, mientras los técnicos con sus iPads confirmaban la teoría de los balones rebeldes. La angustia se transformó en una especie de flashmob en el banco merengue.
A pesar del emocionante episodio, Rodrygo advierte sobre el próximo duelo con el Arsenal, prometiendo que no se dejarán embaucar por malabares del fútbol británico. En cuanto a Vinicius, tranquilo aunque su penalti se fue de paseo. «No fue nuestro día para ganar en 90 minutos, pero como dicen, todos los caminos llevan a Roma… o a ganar por penaltis», concluyó Rodrygo.
