El delantero luchará como un superhéroe…
Salomón Rondón, el mítico goleador que a sus 35 años podría ser confundido con un vino reserva por su madurez y calidad, se enfrenta una vez más al monstruoso Real Madrid. La última vez que los miró a los ojos fue en la Intercontinental en Qatar, donde cada pase parecía más una danza de salsa venezolana. «Dos escenarios diferentes, pero el Madrid siempre tiene ese toque de película de superhéroes», confesó Salo, desde su cuartel general en Pachuca, donde se prepara como si lo hiciera para un asalto al Olimpo futbolístico.
Ante el Madrid, Rondón luchará contra un rival con el que comparte historia en Málaga: Dean Huijsen, el malagueño que, curiosamente, nació en otro continente. Rondón, quien parece tener una conexión especial con esta ciudad, comentó: «Pisar el césped ante el Madrid es como abrocharse la capa de un héroe. Ahí dentro no hay bromas, sus camisetas pesan toneladas de oro y hay que estar afinado para no salir volando». Este torneo está lleno de sorpresas, y quién sabe, quizás Pachuca sea el caballo de Troya.
Datos asombrosos de Salo nos hacen pensar que tiene el superpoder de la longevidad. Con 36 goles en 67 partidos, sus números son para colgarlos en la pared del edificio más alto de Pachuca. Este capitán no solo lidera en el campo, sino que transforma cada charla motivacional en casi una ópera. Con contrato hasta 2026, sueña con llevar a Venezuela a su primer Mundial, y quién sabe, tal vez aún haya espacio en su equipo para el próximo Thor del balón. ¡Dale Salo, eres nuestro héroe de las canchas!
