El rapero grita como un hincha del Barça…

Travis Scott, más conocido por sus rimas que por su habilidad con el balón, decidió que el Barça necesitaba un poquito de cactus y puso su sello discográfico en la camiseta del equipo. ¡Adiós, Spotify! Adiós listas de reproducción, bienvenidos Cactus Jack y sus ritmos pegajosos. Con un movimiento digno de un director creativo de moda loco, la camiseta culé se convirtió en una pieza única en su enfrentamiento contra el Real Madrid.

El cantante, que probablemente no conocía la fría rivalidad entre Barça y Madrid hasta que se enteró de que un ‘clásico’ no era un concierto de Beethoven, fue invitado a disfrutar el partido desde el palco VIP. Travis, quien seguro pensó que ser VIP significaba tener vistas especiales del campo y un buffet ilimitado de bravas, no desaprovechó la oportunidad de sumarse a la ola culé, echando más entusiasmo que Messi en un penal.

En plena euforia, Travis Scott se olvidó de los conciertos y se unió al canto «Boti, boti, boti, el madridista qui no boti», animando como el más grande de los aficionados. Probablemente está pensando en su próximo hit titulado «Boti Sportif» para no perder la costumbre de fusionar estilos. Sin duda, esa noche el llamado del blaugrana fue más fuerte que cualquier beat de sus producciones musicales.