La Tribu se echa unas risas con Vinicius y Arabia

En una nueva edición de La Tribu, el siempre animado Raúl Varela y su séquito de tertulianos protagonizan una tertulia digna de los Grandes Éxitos de las Noticias Surrealistas. El tema de hoy: ¿Qué pasaría si Vinicius cambia el Santiago Bernabéu por las arenas doradas de Arabia? Pedro Riesco, Látigo Serrano, Ricardo Rosety, Jorge Liaño, Pablo Pinto y Jorge Segura demuestran tener más suspense que una telenovela venezolana.

Pedro Riesco, con su innegable talento para el análisis improvisado, duda que alguno de estos clubes europeos—esos con presupuestos que harían llorar a un jeque—tengan el valor de meter la mano en el tarro que es Vinicius. “Podrán ofrecerle un castillo, pero en el Real Madrid ya tiene el trono”, decía mientras sonaba música de fondo digna de una escena dramática.

Por su parte, Látigo Serrano, aprovechando su don para el drama, lanzó una bomba digna de ‘Juegos de Tronos’: «¡Por menos de 300 millones ni lo piensen!». Intentémoslo: un Vinicius a la barbacoa, con sus salsa árabe… ¡qué menú!

Ricardo Rosety, viendo la nueva telenovela del Real Madrid, suspira: “Cuántas emociones, ¿es que esto es una telenovela o un club de fútbol?”. Mientras tanto, Jorge Liaño plantea la cuestión filosófica del día: si Vinicius se siente como un ‘rey destronado’, ¿por qué mira hacia Arabia con tanto interés? Spoiler alert: el dinero siempre es la respuesta.

Entra en escena el astuto Pablo Pinto, que recuerda a todos eso que dicen: “tanto en el amor como en las transferencias, hay dos que siempre meten la mano”. ¿Quien filtra la noticia: Vinicius, el club, o algún genio despistado como el del cuento de Aladino?

Finalmente, Jorge Segura, entre risas, pregunta si Arabia se volverá el nuevo parque temático de los superestrellas del fútbol. Imaginemos a Haaland dándose un paseo en camello o a Lamine dando toques a un balón en medio del desierto.

Raúl Varela cierra con una bomba bien afinada: «Si Arabia ficha a Vinicius, cambia el tablero, muchachos». Y lo cierto es que con tanto dinero circulando, hasta los camellos llevan vaqueros. Pero, por ahora, el Real Madrid sigue dando la impresión de que se necesita algo más que un maletín repleto para arrebatarles otro de sus trofeos. Vamos, que aunque Vinicius se vaya, seguro se lleva a más de uno en la maleta.