El Real Madrid ahora es más futurista que los Jetsons…
¡Que tiemble la NASA! El nuevo técnico del Real Madrid, el inconfundible Xabi Alonso, ha decidido espiar a sus jugadores desde el cielo, cual águila vigía en busca de su desayuno. Esta revolución tecnológica se estrenó en West Palm Beach, donde nuestros jugadores de oro fueron grabados desde las alturas por un dron más potente que los legañosos ojo de halcón. Mientras tanto, Xabi y su equipo toman notas como si estuvieran resolviendo un crimen de novela negra.
Este cambio llega como un rayo láser a una galaxia llamada Real Madrid, que nunca antes había utilizado estos fuegos artificiales voladores para controlar los entrenamientos. Cabe recordar que ni el calmado Carlo Ancelotti en sus tiempos de comanante de esta nave blanca escuchó el zumbido de estas máquinas en plena acción. Aunque en Bayer Leverkusen, nuestro estratega tolosarra prefirió cámaras fijas, ahora parece que quiere grabaciones al estilo «perro perseguido por un repartidor de pizza».
En un rincón del entrenamiento, los canteranos y suplentes ejercitaban sus músculos cual héroes de videojuego, mientras Kylian Mbappé peleaba su propio jefe final: una gastroenteritis que lo dejó más débil que un filete de tofu. Suspiros colectivos de alivio resonaron en el hotel cuando Kylian hizo una pausa en la aventura del retrete. La esperanza es que pronto regrese renovado y vuelva a ser el caballero de velocidad supersónica que todos conocemos.