Los defensas que se juegan su futuro en un Tetris futbolístico…

Imagina a Xabi Alonso como un alquimista medieval que busca la poción perfecta para el Real Madrid desde el banquillo. Esta vez, su fórmula secreta podría incluir a dos jóvenes talentos que han sido también actores en su telenovela alemana en el Leverkusen: Fran García y Miguel Gutiérrez. Ambos parecen vivir en un capítulo de Juego de Tronos, donde el destino está en manos de Alonso y el carril zurdo es el trono a conquistar.

Fran García llamó primero la atención de Xabi desde su torreón alemán, tras un espectacular show de luces y sombras con el Rayo Vallecano. ¡El Bayer Leverkusen vino con una oferta de 10 millones de euros, listo para fichar una estrella! Pero el Madrid, cual héroe de videojuego, pulsó la opción secreta de compra de solo cinco millones y se llevó a Fran, dejando al Leverkusen haciendo pucheros. Ahora, con la llegada de Alonso, el defensa vuelve a encontrarse en la cuerda floja, entre los destinos de Chamartín y el eterno «qué pasará, qué misterio habrá».

Por otro lado, está Miguel Gutiérrez, que vive la vida a lo Juego de la Oca, saltando de casilla en casilla. Sus agentes pensaron en el Leverkusen como un castillo sobre el que desplegar sus banderas, pero Grimaldo decidió que no quería mudarse. Así, Miguel sigue bajo la atenta mirada del Madrid. Quizá encuentren un pergamino mágico que permita su regreso, sobre todo si Xabi, ahora como director de orquesta madridista, hace sonar su batuta y decide que Miguel será una de las notas clave en su sinfonía universitaria del fútbol.