El fichaje que sacó las palomitas en Londres…
Cuentan por ahí que al señor Zubimendi lo llaman de la casa-en-blanco, el Real Madrid, pero resulta que el Arsenal se ha atrincherado cual castillo feudal. Al parecer, Mikel Arteta, el Mago Merlín de los fichajes, ya había lanzado su hechizo sobre el jugador cuando el Arsenal azotó al Real Madrid en los cuartos de la Champions. ¡Señoras y señores! ¡El fichaje está hecho desde entonces, con papeles y todo, como si fuera el contrato de un alquimista a un aprendiz!
Desde Londres lanzan carcajadas cuando escuchan los susurros provenientes de España, como si fueran sus canciones de cuna. «No, gracias», dicen los ‘gunners’, sentaditos en el sofá con una taza de té, mientras esperan a Zubimendi para su aventura asiática en julio. Cien dragones de 65 millones de euros cruzarán la tierra de los orcos, perdón, las cláusulas, para llevarse al mediocentro vasco a las tierras británicas.
Zubimendi podrá compartir paella con Mikel Merino y practicar el idioma del «British villano» con su colega Martin Odegaard. Todo es pura calma londinense mientras el Real Madrid intenta competir con el silencio de una zona azul. Así que por el momento, las aguas están más tranquilas que el canto de un reloj cucú en la campiña inglesa.